Hielo y nieve Superficies resbaladizas o embarradas

Las carreteras heladas, nevadas o embarradas reducen la tracción de los neumáticos, aumentando el riesgo de derrape y pérdida de control. La nieve o el barro acumulados pueden comprometer aún más la adherencia, haciendo que las operaciones sean peligrosas.
Nuestras cadenas están equipadas con agresivos dibujos en la banda de rodadura y eslabones flexibles que se adaptan al contorno de los neumáticos, proporcionando una tracción superior en superficies resbaladizas. El diseño de eslabón abierto evita la acumulación de nieve y barro, garantizando un rendimiento constante. Incluso a temperaturas bajo cero, nuestras cadenas mantienen la flexibilidad y el agarre, garantizando un funcionamiento seguro y fiable en condiciones invernales.